Un día, hace cosa de un mes, por fin toque fondo. Simplemente llegué a la conclusión de que no quería seguir viviendo en un universo sin Dios. Bien, resulta que tengo un rifle. Y lo cargué ¿Puedes creerlo? Lo apunte a la frente y recuerdo que pensé en ese momento: Me voy a matar. Luego pensé: ¿Y si estoy equivocado? ¿Qué pasa si realmente hay Dios? Nadie lo sabe seguro, pero luego pensé: No, la palabra quizá no me basta, quiero tener seguridad o no quiero nada. Oía con claridad el tic tac del reloj. Yo estaba allí, quieto con el rifle apuntándome a la frente, dudando si disparar o no. De repente, el rifle se me disparó. Estaba tan tenso que mi dedo había apretado el gatillo sin que me diera cuenta, sudaba tanto que el rifle resbalo de mi frente y por esa razón no me maté. De repente, los vecinos llamaban, llamaban a la puerta y, y, y no sé, to, to, todo era confusión y, y, entonces me, me fui corriendo a la puerta, no, no sabía que decir, estaba avergonzado y la mente me iba a mil por hora. Y, y solo sabía una cosa, que, que tenía que salir de casa, que tenía que salir al aire libre y despejar la cabeza. Recuerdo con mucha claridad que fui paseando por las calles. Anduve y anduve, no sé lo que pasaba por mi mente. Todo me parecía tan violento e irreal. Continue paseando durante mucho tiempo por el lado noroeste de la ciudad, y supongo que pasaron horas. Los pies me dolían, la cabeza me estallaba y necesitaba sentarme, así que entré en un cine. Ni siquiera sabía qué película ponían, pero me hacía falta un momento de tranquilidad para recomponer mis pensamientos, obrar con lógica, y volver a colocar el mundo en una perspectiva racional. Fui arriba al anfiteatro y me senté. Recuerdo que ponían una película que había visto muchas veces en mi vida, durante mi infancia, y que siempre me había gustado una barbaridad. Bueno, pues allí estaba yo viendo a aquella gente en la pantalla, la película empezó a interesarme y entonces comencé a pensar otra cosa: ¿Cómo se te ocurre matarte? ¿No te parece una estupidez? ¿No lo comprendes? Fíjate en toda esa gente que está ahí arriba, tienen mucha gracia. Eh, Eh, incluso aunque lo peor sea cierto, ¿Que pasa si no existe Dios y nosotros solo vivimos una vez y se acabó? ¿No te interesa, no te interesa esa experiencia? Entonces me dije: ¡Que diablos! No todo es malo. Y pensé para mis adentros: ¿Porqué no dejo de destrozar mi vida buscando respuestas que jamás voy a encontrar y me dedico a disfrutarla mientras dure? Y después, después ¿Quien sabe? Quiero decir, quizás existe algo, nadie lo sabe seguro. Se que la palabra "quizá" es un perchero muy débil en el que colgar toda una vida, pero es el único que tenemos. Luego me acomodé en la butaca y realmente empece a pasarlo bien.
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