A lo largo de los siglos fueron muchos los pueblos que lucharon por conseguir la hegemonía sobre las estepas ucranianas. Durante el siglo XVI son los turcos los que se enfrentan a los polacos por el dominio de la región. Al final, la contienda se inclina a favor de los polacos gracias a la inestimable ayuda de los temibles guerreros cosacos, liderados por el general Taras Bulba. Pero tras la victoria, el general polaco traiciona a sus aliados, acabando con la gran mayoría de las tropas cosacas. Taras Bulba logra sobrevivir y huye a las montañas con la firme promesa de vengar la afrenta y recuperar los terrenos perdidos. Pasan los años, y Taras tiene dos hijos ya crecidos, Andréi y Ostap, a los que envía a estudiar a una ciudad polaca. Allí, Andrei se enamora de una mujer polaca, pero un trágico acontecimiento le obliga a huir de la ciudad junto con su hermano. Un poco más tarde, el general polaco, creyendo que ya se habrán olvidado las antiguas afrentas, convoca de nuevo a los cosacos a luchar en una nueva guerra. Pero lo que desconoce y le costará caro es que Taras Bulba es un hombre que jamás olvida…
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