- Venga, háblame del dinero. ¿Te seduce?
- ¿Que si me sedu…?. Yo jamás… Dicho así parece que habla de una mujer.
- Se acuesta en la cama a tu lado; en ningún instante deja de mirarte. El dinero es una puta que nunca duerme. Y es celosa. Y como no la cuides y le prestes atención, una mañana te despertarás y se habrá marchado para siempre.
- Con todo el respeto, yo no quiero acabar como usted por culpa del dinero.
- Y en vez de eso te casas con él, ¿no?.
- ¿Cómo dice?. Winnie no tiene dinero.
- Claro, creía que eras un cazafortunas.