En el amor debes arriesgar Sandra, arriesgar. Yo no lo hice y mírame ahora. Soy el fantasma solitario y hueco de un hombre, lo que no significa que no vaya a herirte, pero te garantizo algo, ningún dolor que sientas será jamás comparable a la pena que proviene al darle la espalda al amor. Siendo alguien que ha sentido mucho ambas cosas, créeme, el dolor es mejor que la pena y sobre eso no te quepa la menor duda. No huyas, no lo hagas.