- Jules, ¿has oído la filosofía de que cuando un hombre admite que se ha equivocado de inmediato se le perdonan todos sus pecados? ¿Habías oído eso?
-¡Vete a tomar por culo con esa mierda! El cabrón que dijo esa gilipollez nunca tuvo que recoger pedacitos de cráneo por tu puta culpa.