Margaret Keane (Amy Adams) es una pintora que se caracterizó por dibujar niños con ojos extremadamente grandes que rompían la armonía y proporción tradicional del rostro a la que el público estaba acostumbrado. Su obra enseguida causó gran sensación y se convirtió en una de las primeras producciones comerciales más destacadas en la década de los años 50, donde por primera vez el éxito facilita su acceso y aumenta su repercusión hacía un mayor número de gente. El trabajo de la artista inundó las calles de los Estados Unidos.
A pesar del éxito, la tímida artista vivía a la sombra de su marido, quien se presentaba como el autor de sus obras ante el público y la opinión. Margaret decide tomar las riendas de la situación y denuncia a Walter (Christoph Waltz) reclamando sus derechos y beneficios y convirtiéndose en una de las propulsoras del movimiento feminista de la época.
Escribe un comentario largo o tu crítica sobre la película